Tras dieciocho meses de obras, la ejecución por Marea de los trabajos de calderería y montaje electromecánico, se ha comenzado la puesta en marcha de la nueva EDAR de Huércal-Overa, en Almería, una instalación que tratará un volumen diario de 3.563,55 metros cúbicos de agua residual y dará servicio a una población de 23.155 habitantes. A partir de este momento, Marea acometerá toda una serie de verificaciones, comprobaciones y puesta en servicio de las instalaciones, quedando la planta completamente operativa en un plazo de seis meses.
La EDAR se ha construido sobre dos de las cuatro balsas que componían la antigua estación, consistente en un lagunaje. Previo vaciado de las mismas -los fangos existentes se han llevado a planta de compostaje- se ha procedido a la construcción, sin interferir con la explotación de la planta gracias a un by-pass provisional.
El “corazón” de la EDAR, el reactor biológico, se ha diseñado como un proceso de aireación prolongada de baja carga con configuración rectangular, adecuado para la nitrificación-desnitrificación y la eliminación de fósforo por vía biológica.
Para llevar a cabo todos los procesos unitarios del tratamiento se han instalado primeras marcas de equipamiento electromecánico, referencia tanto a nivel nacional como internacional. La instalación está completamente automatizada, gracias a la instrumentación de campo, a autómatas programables y al centro de control, y dispone de telecontrol y telemando.
Debido al aumento de potencia instalada ha sido preciso construir una nueva línea de MT eléctrica.
Finalmente, para proteger la parcela de la EDAR de las avenidas de la rambla de El Saltador se ha construido un muro formado por bloques de escollera artificial formado por más de 1.200 bloques de 4 toneladas.